viernes, 29 de marzo de 2013

Un tropiezo no es caída.


Hay un millón de puertas que se abren, solo tenes que saber donde buscarlas. No es tan fácil como uno piensa conseguir lo que queres, ni se ve tan difícil cuando lo conseguiste, es un viaje largo que a veces cuesta mucho y se sufre tanto como se festeja, pero cuando al fin lo logras te das cuenta que todo eso que te costo tanto, que te hizo sufrir, que hizo que pensaras que el mundo iba a terminar ese día, valió la pena, ya que todo se puede lograr si lo queres de verdad, el resto son escusas.
Muchas veces un problema nos hunde, pensamos que no vamos a poder seguir, nos negamos a seguir buscando lo que queremos solo porque no tenemos en cuenta que un problema deja de ser problema cuando tiene solución, aunque este sea difícil de solucionar.
Nunca abandones tus sueños porque ellos son los que te dan la voluntad de levantarte cada mañana, y siempre recuerda que un tropiezo no es caída.

Cada uno es perfecto a su manera.